rehabilitación de 100 m de tubería en menos de 24 horas.
Se obtiene una estructura homogénea y hermética libre de juntas cerrando toda filtración y fuga.
Interrumpe al mínimo la operación, se puede trabajar en horarios nocturnos o durante paros de operación programados.
Sin obra civil compleja, se evita impacto social, sin cierre completo de vialidades ni impacto a servicios o zonas adyacentes.
Recupera y extiende la vida útil de la tubería por 50 años más.
Resistente a agentes químicos y entornos altamente corrosivos.